No perderé mi dignidad, ante aquél que roba al pueblo, no caeré de rodillas, ante aquel que ha mentido, para gobernar, enriquecerse a costa del sudor, del pobre, no cederé a sus chantajes y extorsiones, a su vileza, no callaré ante la injusticia, ante la hambruna a la que nos han llevado, no respetaré una dictadura, oculta tras una democracia, manejada por aquellos, que con la sangre de otros, forjaron su imperio, corrupto y mugriento, no rezaré por sus muertos, y supuestos martires, pues en mi bando, también lo hubieron, fusilados por aquellos llamados nacionales, parias de otros, no besaré nunca su bandera, no me representa, seré y moriré, Republicana.