lunes, 4 de agosto de 2014

Me oculto como la niebla que cubre con su manto gris al cielo. Así me oculto de ti. Soy madero que flota a la deriva, y más desde el terrible hachazo de la vida, que no para de girar, y mofarse de mi, como un payaso cansado de hacer lo mismo, día tras día. Me oculto, por mi vanidad, por aprender, me enseño la vida que no a todos debes dar a conocer, tus miedos y esperanzas, como jueces te juzgan y preparan el hacha, y sesgan tú vida. Me oculto por mi soberbia, capaz de arrasar pueblos y generar violencia. Me oculto de mi, de mí misma, de quien no soy y pretendo ser. Me oculto de ti, del daño que te causaría. Soy sombra, oculta tras las esquinas, mendiga como la noche, busca a la luna que la guía.

No hay comentarios:

Publicar un comentario