Mil y un propositos de enmienda
aunque me corazón no entienda
de palabras dulces y agrios corazones
que te sumergen en el influjo de sus ambiciones
gastadas melodías
que rebotan en mi mente cada día como amargas experiencias que no hay por donde cogerlas.
Triunfará al final la cordura en este valle de amargura
donde locos creen tener el poder y todo vale en su dictadura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario